SALTO, Abril 01.- (www.SaltoCiudad.com) A los 21 años, de la mano de Daniel Olmos y Rodolfo di Lorenzo, comenzó a militar en la Liga Federal del Peronismo, partido que ama y defiende. Los cargos llegarían en la intendencia de Ricardo Alessandro, y luego en el último gobierno de su entrañable amigo Victorio Migliaro. Una mañana de otoño, Ariel Mendoza recibió a SaltoCiudad dispuesto a contestar todas las preguntas: los últimos días de la gestión Migliaro, las agresiones sufridas durante el conflicto con el campo, su futuro político, y sus impresiones de cara a las legislativas de este año.
Se postergaron las elecciones partidarias en el Partido Justicialista, y finaliza su banca como concejal este año. ¿Qué planes tiene para el futuro?
Efectivamente se han postergado las elecciones partidarias internas del Consejo del Partido Justicialista, y la nueva fecha es el 15 de diciembre, por lo tanto yo seguiré como presidente hasta que se pongan en función las nuevas autoridades que está previsto sea el 27 de diciembre.
Políticamente, voy a seguir militando, trabajando en el lugar que me toque. Me gustaría renovar la banca, pero si no soy de los nombres que se tienen en cuenta para representar al Frente para la Victoria no me voy a enojar ni mucho menos, voy acompañar, voy apoyar la lista que se forme. Soy coherente con mi forma de ser. El que dice que no tiene aspiraciones es mentira, nadie nos obliga a estar en política. Si me eligen o soy una persona seleccionada me encantaría. El que dice que no quiere es demagogia pura.
¿Por qué cree que no hay elecciones internas dentro del PJ?
Las últimas en Salto fueron en el 99. En los dos mandatos que presidí no hubo porque se llegó a un acuerdo previo. Todos los dirigentes de ese momento entendieron que lo mejor era generar una lista de unidad y no generar una interna partidaria. Esos fueron los pensamientos en 2004 y 2008. Siempre se busca tanto a nivel partidario como a cargos electivos, buscar consensos.
¿Y a nivel nacional?
Creo que por los mismos motivos. Es verdad que en las internas quedan muchos heridos, personas que por ahí no coinciden. Pero la elección se convoca, los peronistas afiliados pueden participar en todos los niveles. Es para todos la convocatoria. Si un peronista tiene una forma distinta de pensar es importante que participe de la interna partidaria porque es fácil criticar desde afuera. Dicen que el PJ está cerrado, que no se debate, pero están afuera, que participen, armen una lista y se presenten en las elecciones. Aceptamos las críticas, pero es importante participar desde adentro.
¿Cómo ve al oficialismo de cara a las Primarias?
A mí me parece –y es una opinión personal- que hay dos grandes actores que tienen que ver con las grandes decisiones. Son Cristina Fernández de Kirchner y Daniel Scioli. Creo y estoy convencido de que ellos dos van a tomar la decisión más adecuada para el Frente para la Victoria y para la comunidad. Hay muchos dirigentes pero hoy por hoy pasa por estas dos personas. Y no dejo de destacar las figuras de Martín Sabbatella, de Sergio Massa, que considero que es un gran cuadro político, que administra muy bien su municipio y hay otros como Capitanich, Urtubey, Abal Medina.
A Juan Domingo Perón le costó encontrar su sucesor, ¿considera que al kirchnerismo está frente al mismo problema?
Creo que el proceso de transformación que empezó con Néstor y continuó Cristina hay sido muy importante, con políticas de estado transformadoras que incluso seguirán con los gobiernos que asuman porque son políticas de estado. Entonces, uno ve a Cristina como una figura casi que no tiene reemplazo. Es necesaria la renovación de dirigentes y es lógica. Nos pasó con Perón; yo creo que la figura de Cristina es muy importante, es la gran conductora. Los próximos años ese será el gran dilema del peronismo, quién será el sucesor y continuará con estas políticas de estado muy valiosas. Me parece que la re-reelección desde el punto de vista constitucional es improbable.
Sin contar a Cristina y a Néstor, ¿a quién ve como referente?
Me gusta Daniel Scioli.
Ya que nombra a Scioli, ¿hay referentes en nuestra ciudad de las dos líneas que acompañan al gobernador que son La Juan Domingo y La D.O.S?
Que yo sepa no hay ningún referente de la Juan Domingo ni de la D.O.S en Salto. Los armados de estas dos agrupaciones recién son seccionales. En la segunda, la Juan Domingo tiene como referente a Marcelo Carigiani, ex Intendente y actual senador provincial por San Nicolás. De la D.O.S que yo sepa todavía no hay referente seccional.
¿Cómo vivió estos cuatro años en el Concejo Deliberante?
Los dos primeros años fueron difíciles ya que siendo Oscar Brasca intendente, estuvimos en minoría. Pero no puedo dejar de destacar que en los grandes temas de interés público para la gente hubo consenso entre todos los bloques. Como presidente de bloque pudimos debatir, se sacaron muchos expedientes por unanimidad.
Da la sensación que en algunos momentos el bloque no acompañó al Intendente, ¿qué piensa de eso?
No es así. Un ejemplo importante: la medida más antipática que le toca votar a un concejal es el aumento de tasas municipales y siempre la hemos votado y acompañado.a
Actualmente, ¿con quién se reúne a conversar de política?
Por una cuestión puntual, me junto con Oscar Brasca, con Alberto Pérez. Conversamos de política, debatimos puntos de vista. Oscar es muy abierto, escucha, se puede hablar. Y por una cuestión de amistad y respeto con Migliaro pero hoy hay otras cuestiones que priman en su vida, entonces hablamos de otras cosas.
Lo retrotraigo a 2009, ¿cómo vivió, por un lado, el alejamiento de Migliaro del municipio, y por el otro el conflicto con el campo?
Lo viví muy mal. Yo viví personalmente dos años muy malos, malos porque innecesariamente vecino de Salto tuvieron actitudes poco felices. A nadie le gustaría que le peguen, que pinten tu casa, que lo amenacen, insulten, agredan. Es pasado; nos tocó vivir ese momento como les tocó a otros dirigentes en todo el país. No sé por qué nos castigaron así. No hace falta la agresión: la gente tiene el poder y lo puede reflejar en las urnas. Fue un golpe muy fuerte para Victorio, intentamos convencerlo para que se quede pero él ya tenía la decisión tomada. Migliaro había dicho: si me toca perder me voy. El tuvo la hidalguía política de asumir la derrota cuando no era candidato. Fue uno de los pocos que le dijo que No a la candidatura testimonial porque pensaba que era fallarle a la gente pero se puso la campaña al hombro. El se hizo cargo de la derrota. Nos hubiera gustado seguir, yo creo que hay que empezar y terminar una responsabilidad que se asume.
¿Qué piensa del futuro político de Migliaro?
No puedo responder por él. La verdad no lo sé.
¿Cuál es su opinión de Ricardo Alessandro y Oscar Brasca?
El “Curita” fue otro gran intendente y dirigente peronista de Salto. Fui parte de su gestión, destaco su valentía y fortaleza, le tocó ser intendente durante la crisis de 2001. Marcó una época como la marcó Victorio y ahora lo está haciendo Oscar. Brasca obtuvo uno de los grandes triunfos de la historia del peronismo de Salto.
¿Y de Edgardo Burgos?
Hay que respetarlo como Intendente. Estuvo a cargo del ejecutivo, tiene capacidad, y toda la sabiduría por haber pasado por el Municipio. Hay respeto mutuo. (www.SaltoCiudad.com)