Dana Vai, docente y consejera escolar envió una carta a los medios para advertir sobre un juego para la Play Station 3, llamado GTA 5, que un vendedor le entregó en mano a su hijo de 10 años, sin advertirles a ellos –sus padres- que era un juego que contenía imágenes sangrientas, vocabulario fuerte, escenas de sexo fuerte, violaciones, y droga.
La carta expresa:
“Hace un par de días decidí compartir en la Red Social Facebook una nota alertando a padres de niños de edad aproximada a la de mis hijos acerca de una situación que vivimos y que probablemente pueda estarles pasando sin que lo hayan notado del mismo modo que nos ocurrió a nosotros.
Aproximadamente hace dos meses atrás, luego de una gran insistencia de mi hijo Bautista y a pesar de lo costoso que significa a comprar un juego para su consola de juegos PS3. Luego de buscarlo intensamente en diversos comercios de nuestra ciudad y sin suerte, puesto que no estaba disponible logramos su cometido en un local de la marca SONY en un conocido centro comercial de la Capital Federal. Allí fuimos atendidos cordialmente por un asesor quien luego de que pasáramos por el sector de Caja le entregó en manos el Juego a mi hijo haciéndole saber que era el “MÁS VENDIDO EN LA HISTORIA DE LA FIRMA”, sin considerar necesario aclarar nada más.
Una vez en casa, el presunto juego fue el mayor entretenimiento de mi pequeño de 10 años, sus primos, amigos y cuanto chico viniera de visita. Nada nos parecía preocupante puesto que estaba dentro de nuestra casa, jugando sanamente luego de haber culminado todas las tareas escolares y extraescolares y era inimaginable suponer las características que reunía el mismo.
El sábado pasado, un familiar decide comprar para su hijo el mismo video juego, ya que cada vez que venía a mi casa se entusiasmaba aún más. Se dirige a un comercio de nuestra localidad donde le dicen no tenerlo disponible sin ningún otro detalle ni observación. Continúan la búsqueda y se dirigen a una Juguetería donde con muy buen tino y excelente responsabilidad, seguramente propia de una madre, le advierten que ese Juego, que lleva el título de GTA 5, no es apto para menores puesto que contiene imágenes sangrientas, vocabulario fuerte, escenas de sexo fuerte, violaciones, droga y alcoholismo.
Preocupado recibo la llamada de mi fliar, quien me hace saber lo ocurrido. Inmediatamente observo la caja del juego y encuentro en un recuadro mínimo, con letras insignificantes una inscripción que decía Maduro +17, y debajo, mucho más pequeño aún, escrita las características tal cual las había descripto la vendedora.
Estoy convencida que a pesar de los detalles no es un juego apto para personas de ninguna franja etaria y aunque desconozco el porqué de la libre comercialización somos los padres los primeros responsables en la formación de nuestros hijos.
A menudo nos llenamos la boca hablando y despotricando de la calidad educativa, responsabilizamos a escuelas y a docentes de los fracasos diarios sin pensar que somos nosotros quienes debemos transmitir conductas que reclamamos a los demás.
Como madre y docente asumo mi responsabilidad en esta situación y lo comparto con Ustedes, papás, tíos, hermanos, docentes y quienes quieran acompañarme para que juntos logremos cuidar el futuro por el que tanto luchamos no permitiendo que contaminen el único vestigio de pureza que sólo es posible encontrar en el corazón y el alma de un niño”.