SALTO, Septiembre 26 (www.SaltoCiudad.com) En el escenario, dispuesto en el predio del ex ferrocarril Urquiza, la wiphala -bandera cuadrangular de siete colores usada por las etnias Andinas- abrazaba a la insignia patria Argentina. En los mástiles flameaban banderas de diferentes países. Los símbolos representaban el espíritu que se viviría durante las jornadas organizadas por el Museo del Campo y la Municipalidad de Salto.
De colectividades, personificadas por grupos de danza que mostraron los bailes típicos de Bolivia, Perú, Venezuela, México; del tango representado por parejas que le sacaron lustre al escenario mediante el 2x4; de folklore; de la historia de los primeros inmigrantes que llegaron a Salto; de cantantes y músicos que acuden a los talleres que se brindan en la Dirección de Cultura y demostraron sus habilidades en el escenario.
La muestra comenzó el sábado por la mañana con la apertura oficial y continuó a la tarde con espectáculos musicales, el patio de comidas (donde podían saborear comidas típicas de diferentes países); y artesanías. El público de todas las edades, que concurrió masivamente durante las dos jornadas, se ubicó tanto en las mesas y sillas dispuestas en el predio como sobre el césped. No faltaron las reposeras, los cochecitos con bebé y el mate.
El sábado, la folklorista santiagueña Roxana Carabajal fue la responsable del cierre y el domingo, luego de la impecable actuación de Namuncurá, primitos del Morales, grupo oriundo de la zona Norte de Gran Buenos Aires, que fusiona ritmos de diversas regiones de Latinoamérica y letras con un importanten contenido social, llegaría el turno del Chango Spasiuk.
Pasadas las 19.30, el músico misionero subió al escenario, y sin haber probado sonido, deleitó con su simpatía, simpleza y talento a todos los presentes. Con un repertorio ecléctico en el que sonaron canciones de Tránsito Cocomarola –conocido como El Taita del Chamamé”; algún tango y folklore, Spasiuk tocó más de una hora acompañado de un joven guitarrista proveniente de la provincia de Chaco, un percusionista y un violinista.
Al momento de las palabras Spasiuk señaló “este es un momento sumamente constructivo, un momento como para pensar sobre nosotros, pensar sobre un país y sobre un montón de cosas sobre las cuales está hecho este país. Y la música es parte muy importante de todo esto. Y estar en este festejo, compartir este momento con ustedes, es algo que tiene mucho valor y nos da mucha alegría. Muchas gracias por recibirnos tan amables y tan considerados”.
La música siguió hasta cerca de las 21. Luego fue el momento de los aplausos y los saludos. (www.SaltoCiudad.com)