Hola: soy un vecino de la localidad de Arroyo Dulce ejerciendo mi derecho de expresión como cualquier ciudadano de este pueblo, así mi descontento con el trato hacia nosotros, los pueblerinos.
Hace un par de meses el pueblo tuvo la suerte de tener en varias calles el cordón cuneta. Ello significa y debería ser una muestra de crecimiento. Supuestamente dado al costo de estas obras se sobreentiende que debe realizarse por gente capacitada, las cuales trabajan con un plano, ingenieros o agrimensores, etc., en la que se estudian pendientes, perspectivas, etc., para que las cosas salgan como corresponden.
Pero el error se reitera: uno confía, en las personas en la que depositamos la confianza a través del voto, y ellas a su vez contratan a los supuestos idóneos en la materia, en este caso. Resulta ser que este pueblo no sufre inundaciones al menos que recuerde y ahora desde que las calles las trazo un “profesional” supervisado por las autoridades correspondientes el agua se estanca por días debido a la malas inclinaciones de las calles, cunetas, falta de limpieza de las alcantarillas e inexistencias de las mismas: ¿como puede ser que un pueblo de 9 calles de ancho y con el arroyo mas cercano que pasa a 8km aproximadamente, tengamos calles en las cuales los vecinos no puedan siquiera entrar a su casa?.
Está bien que contra eventos naturales no se puede luchar, pero en este caso el evento natural se asocia a la poca voluntad para realizar las cosas con la seriedad que corresponde, uno llega al extremo de tratar de publicar una nota como esta porque se cansa de hablar con las autoridades, para escuchar soluciones y pasando los días siempre hay una excusa para no terminar los trabajos como corresponde.
Agradezco la predisposición para esta publicación y aprovecho para recordar que los habitantes de Arroyo Dulce existimos todo el año, vivimos acá los 365 días y no 20 días antes de los festejos patronal, donde se embellece la localidad a modo de mejora “momentánea”, lo que es evidente.-
Atentamente Sebastian Coralini
